Perforar un pozo parece, a priori, la solución definitiva para disponer de agua propia; sin embargo, hacerlo sin un estudio previo es la receta perfecta para el fiasco. Errores al perforar un pozo como elegir un punto sin caudal, ignorar la normativa o subestimar los costes provocan sobrecostes, sanciones administrativas y pozos inservibles. En las próximas líneas aprenderás por qué el estudio hidrogeológico es la mejor inversión —y la más barata— para garantizar la viabilidad técnica, económica y legal de tu captación.
Saltarse el estudio hidrogeológico: la raíz de todos los problemas
Un estudio hidrogeológico identifica la presencia, profundidad y calidad del acuífero. Omitirlo multiplica la probabilidad de perforar en seco o sobre un acuífero contaminado, con la consiguiente clausura del pozo.
«Un sondeo cuesta miles de euros; un estudio apenas un 5 % de esa cifra. La diferencia entre éxito y fracaso radica en esos datos iniciales», explica Marta López, PhD en Hidrogeología.
La Asociación CONGEO recuerda que la falta de estudio favorece la sobreexplotación y la degradación química del recurso, comprometiendo su sostenibilidad [1].
Subestimar los costes y los tiempos de obra
Los pozos son extraordinariamente sensibles a profundidad, diámetro y litología. Según el barómetro de precios 2025, perforar un pozo puede costar entre 1 500 € y 15 000 € de media, superando los 40 000 € en casos complejos [2]. El precio por metro oscila entre 60 € y 150 € en terreno rocoso. Sin un presupuesto realista:
- Se agota la partida antes de alcanzar el nivel freático.
- Se abarata en materiales críticos (tubería, filtros), causando colapsos prematuros.
- Se alarga la obra por imprevistos geológicos, encareciendo la maquinaria.
Caso de uso real: Proyecto «Finca Los Olivos» (Afinca Mundo Rural)
En 2024, Afinca Mundo Rural recibió un encargo para dotar de riego a 20 ha de pistacho. El cliente había perforado un primer pozo sin estudio; a 85 m apareció roca dura y la empresa abandonó la obra tras consumir el 80 % del presupuesto. Tras nuestro estudio geofísico, se identificó un acuífero granular continuo a 62 m en otro punto de la parcela. El nuevo pozo se completó por 11 200 € (28 % menos que la primera tentativa fallida) y bombea 9 l/s estables todo el año.
Ignorar la normativa de aguas subterráneas
La legislación española exige autorización administrativa y construcción en condiciones de seguridad. El Real Decreto 665/2023 actualiza el Reglamento del Dominio Público Hidráulico e introduce control digital de captaciones [3]. Además, el Real Decreto 35/2023 obliga a instalar una tubería mínima y registrar parámetros de explotación [4].
Saltarse estos trámites puede acarrear:
- Multas de hasta 300 000 € y precinto del pozo.
- Expedientes sancionadores (296 pozos ilegales sellados solo en Doñana en 2025) [5].
- Imposibilidad de legalización posterior por afección a masas de agua protegidas.
«La normativa está pensada para proteger el acuífero y al usuario; un pozo fuera de la ley es un activo tóxico», advierte Diego Ferrán, abogado especialista en aguas.
Guía de legalización de pozos detalla los requisitos paso a paso.
Obviar pruebas de bombeo y calidad del agua
Las pruebas de bombeo determinan el caudal sostenible y la respuesta del acuífero. Sin ellas, el pozo puede quedar infra‑dimensionado o, peor, provocar abatimientos que afecten a terceros. La normativa exige análisis físico‑químico; ignorarlo expone a contaminación por nitratos, metales o salinidad.
Un test de bombeo de 24 h cuesta entre 700 € y 1 200 €, una cifra mínima frente al riesgo de instalar una bomba inadecuada o explotar un agua no potable.
Cómo evitar estos errores
Planifica
- Contrata un estudio hidrogeológico completo (cartografía, sondeo eléctrico, piezometría).
- Presupuesta con un margen del 20 % para imprevistos.
- Tramita la concesión antes de la obra.
Ejecución controlada
- Selecciona empresas acreditadas y pide memoria técnica.
- Exige tubería certificada y filtros adecuados a la granulometría.
- Realiza prueba de bombeo y analiza la calidad.
Mantenimiento y monitorización
Instala contador volumétrico y aforo trimestral; los nuevos Reglamentos facilitan la declaración responsable anual online.
Preguntas frecuentes
1. ¿Cuánto dura un estudio hidrogeológico?
Entre 2 y 5 semanas, según la complejidad del terreno.
2. ¿Puedo perforar sin permiso si el pozo es para uso doméstico?
No. Toda captación del dominio público hidráulico requiere autorización.
3. ¿Cuál es la vida útil de un pozo bien construido?
Con mantenimiento adecuado, entre 30 y 40 años.
4. ¿Qué pruebas de agua son obligatorias?
Parámetros físico‑químicos y microbiológicos según RD 3/2023; se repiten cada dos años.
5. ¿Cómo afecta el cambio climático a la viabilidad de nuevos pozos?
Los planes hidrológicos revisados en 2023 incorporan escenarios de sequía más severos; cada proyecto debe justificar su sostenibilidad.
6. ¿Es rentable rehabilitar un pozo colapsado?
Depende del estado; por encima del 50 % de tubería dañada suele ser mejor perforar uno nuevo.
7. ¿Qué sanción conlleva un pozo ilegal?
Desde 6 000 € hasta 300 000 € y clausura.
Conclusión
Los errores al perforar un pozo sin estudio previo generan pérdidas económicas y medioambientales difíciles de revertir. Invertir en conocimiento geológico, cumplir la normativa y controlar la explotación son la fórmula para un suministro estable y legal. ¿Listo para perforar con garantías? Visita Afinca Mundo Rural y agenda tu estudio inicial hoy mismo.